Un flagelo de la sociedad llamada moderna... Scarlett Lugo, M.A


Kees van Dongen, Montparnasse Blues, 1922-25
Un flagelo de la sociedad llamada moderna...
Scarlett Lugo, M.A.

Sentarse con la finalidad de analizar acontecimientos que están sucediendo en nuestras narices es una acción para valientes. Innegable es, que la mayoría de los hechos que acontecen a diario, y hasta en frente nuestro, son situaciones propias del quehacer humano. Más, respeto, sensibilidad, flexibilidad, identificación con el dolor ajeno, y todo lo que se pueda desprender en esta tesitura; me pregunto, ¿Donde están? ¿Qué estamos haciendo con las informaciones que recibimos? ¿cómo las estamos colando para hacer de ellas un buen procesamiento cognitivo?, y si lográramos reproducirla, ¿cómo la estamos dando a los que nos escuchan o leen?

Los procesos básicos cognitivos son un grupo de elementos que tienen como una de sus finalidades el logro del pensamiento propiamente dicho, quizás la última.... resulta que, la sensación de algo, la percepción de ello, el cómo, cuándo y por qué de esta percepción, dan forma a lo que luego es información, para así catalogarla una vez que se ha logrado a través de los sensores humanos que nos dan ese permiso. Lo que vemos, lo que oímos, se infiltra en nuestro cerebro como por arte de magia, -nooo, es proceso del conocimiento- y busca su forma. Lo ya conocido entonces, sale a flote y nombra esa información. La misma, cobra atención cerebral , y te mantiene a la expectativa de eso que estas procesando. La memoria a corto y largo plazo se activa también, para guardar eso que ya hemos procesado... y zas... pensamos. Estamos en el tiempo en que desaprender es una de las nuevas actividades que necesitamos realizar, casi a diario... para luego aprender de una forma distinta a la desaprendida.

Pero, ¿cómo es nuestro pensamiento? Limpio, puro, inclinado a la crítica objetiva de nuestra sociedad llamada moderna. ¿Qué es lo que hemos aprendido para que nos atraiga tanto aquello que atenta contra nuestra vergüenza; cosa que criticamos en otros muchas veces, y somos actores principales de la acción criticada? ¿Qué señal le enviamos a nuestro cerebro cuando algo cruel desagradable, prohibido, sea lo que que quiero ver? ¿Qué tan educado estamos como para que nuestros mas íntimos deseos, o demonios como alguno dijera, nos llamen tanto a ver cosas que en nuestra sociedad son amorales (considerando la cultura), que atenta con el sistema de valores que nos dieron nuestros padres como buenos y válidos para personas correctas? Waoo! Personas correctas... Así nos llama la sociedad moderna. ¿Qué hay del pensamiento que todos tienen de sí?

Existe un gemido inaudible de respeto por uno. Existe una voz que se eleva cuantas veces te faltas, me faltas, le faltas al otro; Bien creo, no hay quien oiga. Abandonemos el morbo, y ofrezcamos la ayuda, no sigamos siendo sordos a quienes gritan a nuestro oído lo que no deseamos escuchar, pero que si sabemos exigir... Dejemos de ser propulsores del flagelo que mal manejado, resta. No debe ser una necesidad.

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