Contando y en espera... Scarlett Lugo, M. A

Pedid y se os dará, buscad y os hallareis, llamad y se os abrirá. Mateo 7:7

Contando y en espera...

Scarlett Lugo, M. A.

Diez, nueve.... así va contando todo el que espera un acontecimiento. Puede darse al revés, dependerá de quien cuente. A la larga también espera.

La mujer en gestación, espera ver su criatura viva y viable en sus brazos después de haber acariciado tantas veces la idea de que alguien se forma dentro de sí. Espera la madre adulta que ha dedicado su vida a la crianza de su prole, siempre mantiene vida la esperanza de que uno de ellos responderá. Espera el padre, quien puede que no haya sido el mejor en la crianza de sus hijos, pero mantiene en sus adentros que alguno lo ha de amar. Espera, aquel que se ha apropiado de echar su pan sobre las aguas y después de de muchos días lo recogerá. Espera quien se envuelve el en gran misterio de dar sin recibir nada a cambio. Cumple así una determinación del cielo, obedece a una ley cósmica, usando una palabra rara...

Ocho, siete... Espera quien ha solicitado algún favor, o la concesión de lo que entiende le pertenece, esperan justicia. Muchos esperan a Jesús o tan siquiera el abrazo de ese ser incorpóreo que te llena de su paz. Otros, el milagro que entienden les ha de llegar. Mantienen viva en sus mentes esa convicción de que eso va a suceder. Activan dos letras que parecerían tan insignificantes en determinado momento, pero, que una vez juntas, te mueven el gran cielo: Fe. Se hacen eco de una acción que no se toca, pero que mueve a mover montañas, cielos abiertos, hasta el mismo universo: Creer.

Seis y contando... Espera, quien ha sido privado de su libertad, más los que se entienden inocentes, y hasta palitos hacen en su pared, que aquel que aún sabiendo que es culpable, su prisión pronto acabará. No obstante, también espera todo aquel que no se encuentra entre barrotes, pero que sí tiene limites para accionar en cualquier decisión tomada... Esperan lo que anhelan justicia en su más amplia gama; también los enfermos, las viudas, los huérfanos, los ricos... Oh Dios, lista de nunca acabar!..

Cinco, cuatro... Esperan los que se preparan como mejores ciudadanos, los que se profesionalizan en una área especifica a través de la inversión de su tiempo y empeño. Esperan, los que están calificados, los que no se detienen en busca de una autoreacionalización personal. También, esperan los que de éste dependen. Y volvemos al principio. Al óvulo fecundado que luego se vuelve cigoto y si logra llegar a formarse, continua la gran carrera. Continua la larga espera... Tres, dos, uno, cero... Boomm! Al fin hemos llegado. Pero no se queda ahí. Lo cíclico de la vida, nos muestra que todo gira. Hay esperas aquí no mencionadas, es su turno meditarlas, más, no olvide que fe y creer son su mejor zapata. ...Ya lo recibirá...