Oh señora Prudencia... Scarlett Lugo, M. A.
Sue Helderberg Oh señora Prudencia... Scarlett Lugo, M. A. La vestimenta que exhibe cada quien, será conforme a quien se vista. Más, es necesario que algunas ropas que hoy están en desuso, se vuelvan a utilizar, por eso que es que nada nuevo, jamas abrá. Los colores, los estilos, las formas, siempre serán tan variadas como ellos mismos, sin embargo, quien elige, tiene una estructura mental que queda evidenciada cuantas veces una pieza escoja y la adopta para sí. Cada ser, usa lo que le identifica. Lo acoge a su tiempo, lo usa según la necesidad, en verano, en otoño, o en invierno. La primavera, en muchos, siempre reinará. Ahora bien, existen vestimentas no muy tangibles. Son aquellas que hacen presencia en ti, aunque no las menciones tan siquiera, y que no eres tu quien la nota, solo las desarrollas, si es que la entiendes parte de ti. Actuar bien, hacerlo con cuidado, con justeza, fortaleza, cautela y sensatez es una virtud muy valorada. Es u